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Fundadora de las “Adoratrices de la Sangre de Cristo” en 1834. Nació en 1805 en Vallecorsa, cerca de Frosinone. Sus padres, del mundo del derecho y desahogados, tuvieron once hijos. Eran piadosos y la educaron con desahogo. En 1822 participó en la misión popular que dio en su localidad San Gaspar de Búfalo y se sintió transformada. Bajo su inspiración, surge la nueva Institución para orar y atender a jóvenes pobres. Se inicia como una Fraternidad de Maestras.
En 1824, los Misioneros de la Preciosísima Sangre en Vallecorsa, se establecieron en su pueblo. El Padre Juan Merlini, fue su director y animador en la formación del nuevo Instituto.
En 1834 comenzó su tarea en la escuela de Acuto, con una criada de su casa, María Tullio. Así nació el Instituto que pronto el grupo fue aumentando. Al morir San Gaspar de Buffalo, el 28 de Diciembre de 1837, les dejó ya escritas las consignas de la nueva obra.
En 1841 se comenzaron nuevas casas en Pescasseroli y en Morino. En 1842, se abrió la de Cascia, en Umbría. El 27 de Agosto de 1843 se instaló en la casa central en el Hospital que ella restauró. En 1844 se abrieron otras casas, como las de Carpientro, Orte y Gavignano.
En 1851 se instalo en Roma y varias zonas de la periferia y obtuvo la ayuda personal de Pío IX, que se preocupó mucho por el Instituto. En 1863 fueron las primeras Hermanas a Londres. Tenían las Hermanas ya 59 casas.
En 1866 falleció en Roma y fe enterrada en Campo Verano, por deseo de Pío IX. Fue Beatificada por Pío XII el 1 de Octubre de 1950.
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